sábado

UN HOMBRE PRIMITIVO FRENTE A UN ESCAPARATE


Te quiero así, inaccesible.
Tras el cristal.
Te quiero limpia, sobria, callada y afeitada.
Sin olores, sin grumo menstrual.
Te quiero quietecita en tu escaparate.
Podré verte de temporada en temporada.
Te prefiero en la sección de lencería.
Te quiero inalcanzable, envidiable.
Sin descorchones, ni extremidades caídas.
Te quiero joven, te quiero inerte.
Te quiero encerrada en las eternas rebajas.
Sin palabras que las más de las veces sobran.
Te quiero inaccesible.

No hay comentarios: